Por Cristian Poot
La poesía es un guiño franco a la Verdad. Un salto al vacío cuya esperanza de blando aterrizaje es encontrar algún Sentido en la existencia. La poesía, tal parece revestirse en múltiples formas, tonos, ritmos, voces, miradas, formas de ser y estar. Pero puede que en el empeño de buscar la Poesía demos la espalda al mundo y puede que el mundo mismo nos dé también la espalda. O al revés. Sin embargo, es en ese espacio de negativas, en ese espacio llamado silencio que, la poesía se manifiesta como piedras vivas que se asoman y se asombran de nuestro propio asombro.
Esta poesía de Sentido, que tiene el afilado amor de obsidiana, está presente en el poemario de Jair Universo Cortés, “Bajo la luna Caníbal”, la más reciente entrega de este poeta y nadador, que celebramos y agradecemos porque nos hace brindar por la vida. Este libro nos invita a mirarnos con ojos de verdad, porque: sólo en otros ojos/podrás ver el Rostro:/el tuyo/propio y verdadero (p. 17).
El poemario “Bajo la luna caníbal” es un libro de algún modo profético con frutos poéticos de un recogimiento interior del p(r)o(f)eta Jair Universo. Hay a lo largo de este poemario un sentido del humor lleno de intuición y, algunas veces, de cierta ironía y resistencia. Se compone de siete apartados y cada uno de ellos es testimonio de vida en Bacalar.
A lo largo de estos poemas se expone una visión del mundo, un tanto a la manera del profeta de Nietzche, Zaratustra, quien regresa al mundo para cantar el fruto de su experiencia, en este caso, poética. Así Jair canta sus poemas, como un sabio ermitaño que sugiere a sus pupilos (¿pupiles?), perseguir alguna verdad portentosa, al observar el camino de las hormigas, que han hecho ya una fila que sueña con llevárselo en hombros/como a un gigante cautivo e inmóvil (p. 19). Todo esto con la finalidad de renacer, volver a casa.
En la manufactura de este libro se prodigan verdades alejadas de toda solemnidad, por ejemplo, este aforismo: la función del tábano es regresarte al Presente (p. 30). No obstante, aún bajo esta línea expresiva, surgen otros cuestionamientos que nos devuelven al Aquí y ahora sin el paracaídas de la risa:
Si no usas la semilla intercambiando bienes, entonces puedes comerla: se convierte en energía; pero ¿un billete, una transferencia electrónica? ¿cómo se come?
Bajo esta luna caníbal hay espacio para el amor cortés, donde el amante sin tiempo canta el milagro de la noche y los favores recibidos. ¿Acaso luna caníbal es uróboros? ¿Un juego de niños en donde gana el que desaparece? ¿Un ciclo perpetuo de destrucción y creación? ¿Acaso el amor?
Lo cierto es que, bajo esa luna que devora a sus congéneres, hay un tiempo detenido en la mirada del p(r)o(f)eta, que también es haijín, y, nos regala estos traviesos destellos:
CARIBE ORIENTAL
En las orillas
un luchador de sumo
cangrejo gordo.
(p. 57)
VACACIONES DE VERANO
La clavadista
mete un poco de sol
dentro del agua.
(p.58)
HISTORIA DE CHINA
Tibia nevada
una ración de arroz
entre mis manos.
(p. 61)
Así, la luna caníbal de poesía nos sonríe que vivir no tiene retroceso, sólo aprendizaje, y aprender es recordar/lo que al crecer olvidamos. Pero aprender es también sonreír, como quien pinta una laguna y la mira florecer, sabedor de que cada elemento en el mundo tiene algo de mar que en vastedad reverdece. Y aunque el Mar devuelve todas las palabras, no hay frase que resista el oleaje de la risa. Pues cada ola sabe que, al partir sin despedirse, la fiesta permanece intacta. Salud.
Chetumal, Quintana Roo, a 18 de septiembre de 2024.
Cristian Poot. Poeta de origen maya. Felipe Carrillo Puerto (1992). Autor del poemario Nostalgia de pájaros (2015) e Infancia remota (2019). Mención honorífica del Premio Estatal de la Juventud de Quintana Roo (2015). Becario PECDA de Quintana Roo (2018 y 2023). Mención honorífica en el Premio Internacional Caribe-Isla Mujeres de Poesía 2019. Próximamente publicará su cuarto poemario Son estas las semillas en las que todo regresa bajo el sello editorial de Colombia, Cátedra Pedagógica.